Al finalizar los tres años de estudios de Teología en la Pontificia Universidad Gregoriana en Roma quiero compartir mi experiencia.
En un principio me pareció un gran reto, pero gradualmente descubrí el gusto por el estudio y el ambiente universitario. No solo aprendí la teoría en la universidad, sino que también tomé muchos elementos pasando y conociendo las calles de Roma, pero sobre todo descubrí la gran riqueza de nuestro carisma en la casa de Sant’Andrea. Con todo esto me doy cuenta que todo es Gracia y que todo esto fue un don de Dios que me entregó sin merecer.
Al terminar la Teología en el mes de febrero de este año pedí estudiar una licencia viendo la manera de cómo ayudar a la Orden. Y, habiendo entregado propuestas a mis superiores, ellos me concedieron estudiar la Licencia en Formación Sacerdotal y Vida Religiosa.
Así, en este año he comenzado algunos cursos de esta Licencia y me gustaría compartir que veo una continuación de los estudios teológicos con los cursos que ahora tomo. Y me percato que más que conocer conceptos, puedo profundizar la realidad de la Iglesia y de la necesidad de la Formación para la Vida Religiosa, y sobretodo aprovechar estos cursos para mi proceso vocacional a nivel personal. Espero que después de terminar estos estudios de la Licenciatura pueda ayudar a nuestra amada Orden Teatina.